Pese a que en Estados Unidos el gobierno anima a tener más hijos para evitar el envejecimiento de la población, las nuevos recortes están provocando justo lo contrario.
Ya se ha anunciado la posible eliminación del crédito tributario por hijos, y las becas destinadas a estudiantes universitarios también van a sufrir un serio recorte de presupuesto.
Es evidente que cada vez menos padres llevan a sus hijos a las guarderías para ahorrar un poco de dinero, y cada vez más familias viven por debajo del umbral de pobreza. El año pasado un tercio de la población africano-americana e hispana ya vivía por debajo de dicho umbral, y el número de familias sigue aumentando.
La crisis ha provocado que encontrar un trabajo adecuadamente remunerado con un seguro que cubra a los niños sea cada vez más difícil, lo que no hace más que empeorar la situación.
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